Para cada valle
hay una montaña
Y para cada meseta
una llanura.
A veces es solo
un camino solitario
a lo largo
de un sendero batido.
A veces pensamos
que la vida ha terminado
cuando apenas
ha comenzado.
Jesús es
nuestro gran Redentor
su amor nunca falla
Levanta en alto
su Real Estandarte
proclama su
Santo Nombre
Es en nuestra debilidad
donde Dios revela su fortaleza.
Es en nuestros lugares más oscuros
donde más brillará su Luz.
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